En el post de hoy, vamos a hablarte sobre todo lo que tienes que saber sobre la fibromialgia.

Y es que se estima que el 6,3% de la población mundial soporta esta afección crónica.

En nuestro país es muy frecuente y la padece entre el 2 y el 3% de la población, lo que supone entre 400.000 y 1.200.000 personas con fibromialgia en España.

Durante mucho tiempo, esta enfermedad que provoca el sufrimiento de tantas personas se ha menospreciado al no haber causa conocida y tener un diagnóstico tan difícil de realizar.

Por eso, y para poder ayudarte si es tu caso o el de algún familiar o conocido, queremos contarte los puntos clave sobre ella.

¿QUÉ ES LA FIBROMIALGIA?

La OMS reconoció esta dolencia en 1992 y la define como "aquella alteración o interrupción de la estructura o función de una parte del cuerpo, con síntomas y signos característicos y cuya etiología, patogenia y pronóstico pueden ser conocidos o no".

 Su nombre deriva de: "FIBROS" (tejidos blandos del cuerpo), "MIOS" (músculos) y "ALGIA" (dolor).

Su causa es desconocida y se caracteriza por un dolor musculoesquelético generalizado.

La persona que la padece siente que le duele, literalmente, todo el cuerpo.

Además, también aumenta la sensibilidad al dolor, el cansancio, la fatiga, la rigidez, la ansiedad y la depresión.

Cualquier persona puede padecer fibromialgia, pero es más común en mujeres, en personas de edad media y aquellas con enfermedades previas como espondilitis anquilosante, lupus o artritis reumatoide.

¿CÓMO SE SI TENGO FIBROMIALGIA?

Cuando el dolor generalizado en músculos, articulaciones y ligamentos se mantengan en el tiempo (por lo menos durante 3 meses) y vayan acompañados de otros síntomas como alteraciones del sueño, cansancio severo, rigidez muscular o dolores de cabeza, es vital que acudas al médico.

En su consulta, valorará tu situación y deberá derivarte al hospital para que te vea un especialista.

Allí, te realizarán las pruebas analíticas que consideren necesarias para descartar otras dolencias o posibles enfermedades.

Es importante saber que la fibromialgia no se detecta a través de ninguna analítica, así que si los resultados de tus pruebas descartan otras posibles dolencias asociadas a tu malestar, procederán al análisis de las zonas de tu cuerpo más sensibles al dolor, estimulándolas de diferentes formas.

Para cumplir con los criterios, debes tener dolor en al menos cuatro de estas cinco zonas:

• Zonas superiores izquierda y derecha (incluidos hombros, brazos y mandíbulas).
• Zonas inferiores izquierda y derecha (incluidas las caderas, los glúteos y las piernas).
• Región axial, que incluye el cuello, la espalda, el pecho y el abdomen.

Este examen es clave para el diagnóstico de la enfermedad.

¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO PARA LA FIBROMIALGIA?

Los tratamientos para la fibromialgia son personalizados e incluyen, además de medicamentos (en general, analgésicos y antidepresivos), una estrategia para el cuidado personal.

Esta estrategia incluye:

Cambios en el estilo de vida

Es importante que aprendas a manejar el estrés, limitando tu sobreesfuerzo y autoexigencias y teniendo tiempo de calidad para ti.

Aprende a mirar por tu bienestar, lo que implica no sentirte culpable por decir el temido “no” que tanto nos cuesta.

Expresa tus necesidades y pon los límites que consideres necesarios.

Además, sería ideal que practicaras técnicas de relajación a través de la respiración, el mindfulness (vivir el presente como única realidad posible) y la meditación.

Por otro lado, es importante que tu sueño sea de calidad, para lo que es recomendable:

• Dormir las horas suficientes.
• Aprender a respetar los ciclos circadianos de tu cuerpo, que son los que regulan el descanso y la vigilia.
• Evitar las pantallas (móviles, tablets o televisión) por lo menos 2 horas antes de dormir, así como las cenas copiosas.
• Intentar acostarte y levantarte a la misma hora todos los días de la semana.

Hacer ejercicio regularmente te ayudará a disminuir tus síntomas. Un fisioterapeuta puede ayudarte a determinar cuáles son los mejores para ti.

También son recomendables los ejercicios de estiramientos, los que te ayuden a mantener una buena postura corporal y los que te inviten a relajarte. Te recomendamos fervientemente que pruebes el yoga. 

Cambios en la alimentación

Es crucial que comas alimentos saludables y que reduzcas todo aquello que se ha demostrado científicamente que inflama tu cuerpo (evita los aditivos y las toxinas, los alimentos procesados, el azúcar, el gluten, la leche, etc.).



En su lugar, consume grasas saludables (frutos secos, aguacate, aceitunas, pescados azules, etc.), frutas y verduras en cantidad. ¡Y dale a tu cuerpo el agua que necesita!

Terapias

Pueden ser de gran ayuda para ti. Además de las relacionadas con la buena salud mental como la psicología, existen otras muy efectivas contra la fibromialgia. 

La fisioterapia, la osteopatía y la acupuntura han demostrado ser muy efectivas contra el dolor crónico.

Además, los profesionales pueden enseñarte técnicas de relajación, hábitos para mantener una correcta posición corporal que evite que tu cuerpo se fatigue más y ejercicios para mejorar tu fuerza, flexibilidad y resistencia.

En la Clínica Sabier contamos con un gran abanico de especialistas que te pueden ayudar.

Nuestra unidad contra el dolor crónico cuenta con un método propio de diagnóstico y tratamiento para dar respuesta a tu malestar de forma eficaz.

Contamos con un equipo multidisciplinar formado por médicos, fisioterapeutas, osteópatas, podólogos, biomecánicos, nutricionistas y terapeutas SB10®, que utilizan las técnicas de tratamiento y aparatología médica más avanzada que existe hoy en día.

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Y ven a vernos, queremos ayudarte a sentir mejor.